En una noche histórica para el Paris Saint-Germain, el conjunto francés logró una imponente victoria ante el Real Madrid (4-0) en el MetLife Stadium, asegurando su pase a la final del Mundial de Clubes. Más allá del resultado, hubo un protagonista con una historia personal que acaparó la atención: Achraf Hakimi, quien se reencontró con su antiguo club en una de sus mejores actuaciones de la temporada.
El lateral marroquí fue figura en la contundente victoria del PSG sobre su exequipo y dejó unas declaraciones que revivieron su salida del conjunto blanco.
Achraf Hakimi brilla ante el Real Madrid y lanza un mensaje contundente: «No fui yo quien decidió dejar el club»
El internacional marroquí se mostró intratable por el carril derecho, combinando velocidad, técnica y criterio para generar peligro constante. Participó de manera decisiva en la jugada del segundo gol y fue clave durante todo el partido, siendo una pesadilla para la defensa merengue. Su actuación no pasó desapercibida, pero fue su mensaje postpartido lo que terminó por generar un auténtico revuelo en el entorno blanco.
«No fui yo quien decidió dejar el Madrid. Fueron ellos quienes tomaron esa decisión», aseguró Achraf con serenidad, pero sin ocultar cierta carga emocional.
Un adiós que no fue por elección propia
Achraf Hakimi dejó el Real Madrid hace cinco años, tras una destacada cesión en el Borussia Dortmund donde mostró todo su potencial. A pesar de su rendimiento, el club blanco optó por venderlo al Inter de Milán por 43 millones de euros, una decisión que, según el propio jugador, no fue compartida por él.
“Estoy contento porque me dejaron hacer lo que me gusta: jugar, disfrutar”, añadió el defensor del PSG, actualmente en plena madurez futbolística.
Desde entonces, la carrera de Hakimi ha ido en ascenso. Tras su paso por la Serie A, se convirtió en una de las figuras del PSG, consolidándose como uno de los laterales más completos del fútbol europeo. Su evolución ha sido constante, y bajo el mando de Luis Enrique, su rol dentro del equipo ha dado un salto cualitativo.
El lateral total que marca la diferencia
Achraf ya no es simplemente un lateral. Su influencia en el campo lo convierte en un auténtico recurso ofensivo, con libertad para atacar como un extremo gracias al respaldo táctico del equipo. En el PSG, ha encontrado el entorno ideal para explotar al máximo sus cualidades: velocidad, capacidad de asociación, visión de juego y una notable capacidad de definición.
En los últimos seis partidos eliminatorios, Hakimi ha participado directamente en seis goles (cuatro anotaciones y dos asistencias), siendo decisivo en cada una de las fases importantes. Ante el Real Madrid, volvió a demostrar que se encuentra en su mejor nivel. Ni Vinicius ni Mbappé, quienes intercambiaron bandas durante el partido, pudieron desbordarlo o frenarlo.
El PSG de Luis Enrique, una máquina en funcionamiento
La versión actual del PSG que dirige Luis Enrique ha evolucionado hacia un conjunto letal, organizado y con múltiples recursos ofensivos. Achraf es una pieza esencial dentro de ese engranaje. Su entendimiento del juego, capacidad de romper líneas y protagonismo en el tercio final del campo lo convierten en un jugador determinante en las grandes noches.
La contundente victoria ante el Real Madrid no solo significó una clasificación a la final del Mundial de Clubes, sino también una especie de reivindicación personal para Hakimi, quien demostró en el campo todo lo que puede ofrecer y lo que el club blanco dejó escapar.
Una final para hacer historia
Con el PSG ya instalado en la final, el próximo reto será nada menos que el Chelsea, un rival de peso al que buscarán vencer para levantar el título mundial. Hakimi, como uno de los líderes silenciosos del equipo, se perfila nuevamente como un hombre clave para lograr el objetivo.
A pesar de no tener el cartel mediático de otros nombres del plantel parisino, como Mbappé o Dembélé, Achraf ha sabido ganarse el respeto y la admiración de propios y extraños por su consistencia y rendimiento. Su historia es la de un futbolista que, tras verse obligado a salir de casa, encontró su lugar en el mundo para brillar con luz propia.
El Madrid cerró una puerta, el PSG abrió un escenario
Lo que comenzó como un capítulo doloroso en su carrera se ha transformado en un ejemplo de superación. La decisión del Real Madrid de prescindir de Hakimi sigue siendo cuestionada por una parte de la afición, especialmente tras partidos como el vivido en Nueva York, donde el marroquí fue una de las grandes figuras.
Hoy, con 25 años y en la plenitud de su carrera, Achraf Hakimi no solo es uno de los mejores laterales del mundo, sino también una pieza que cualquier equipo de élite querría tener. En el PSG ha encontrado estabilidad, confianza y un sistema que le permite mostrar lo mejor de su repertorio. La historia frente al Madrid fue solo un recordatorio: el talento no se detiene, aunque lo subestimen.